¿Qué es la Mesoterapia?

La mesoterapia es una técnica terapéutica que consiste en la realización de multiinyecciones superficiales (intradérmicas) e indoloras, a menos de 4 mm. de profundidad, de medicación.

La medicación a utilizar dependerá de la patología a tratar: sus causas, su intensidad, su duración, sus recaídas…

Las inyecciones se pueden realizar básicamente de dos maneras:

1. Manualmente, en cuyo caso toma gran importancia una buena técnica inyectiva.
2. Con aparatos de inyección asistida (pistolas).

Las ventajas de utilizar pistolas de mesoterapia radica en dos principios básicos:

1. La capacidad de inyectar medicación a menos de 4 mm. de profundidad de epidermis es mayor que con la técnica manual, dado que estos aparatos se pueden calibrar.
2. La fragmentación de dosis de medicamento a inyectar en cada pinchazo es más exacta por el mismo motivo.

Se decide una técnica inyectiva u otra en función de varios parámetros:

1. Pericia profesional del propio mesoterapeuta.
2. Patología a tratar.
3. Objetivos buscados al realizar el tratamiento.
4. Estado evolutivo de la propia patología tratada.

En principio y como norma general, la mesoterapia aplica el aforismo descrito por su creador el Dr. Pistor: “poco, pocas veces y en el lugar adecuado”, haciendo referencia a:

1. “Poco”: poca cantidad de medicación inyectada, con lo que se minimizan los efectos secundarios no deseados de la medicación que si que se observa por otras vías de administración (vía oral, vía intramuscular, vía intravenosa…) y también el coste económico que se deriva de un tratamiento mantenido.
2. “Pocas veces”: las mínimas sesiones posibles hasta alcanzar el objetivo deseado. Por norma general, se realizará 1 sesión cada 7-15 días, espaciando las sesiones en el tiempo según exista mejoría.
3. “En el lugar adecuado”: haciendo referencia a su administración local, a menos de 4 mm. de profundidad de epidermis, lugar donde a la vez se potencia el efecto beneficioso de la medicación inyectada.

En definitiva, la mesoterapia brinda la posibilidad de hacer “más con menos”: más efecto terapéutico con menos medicación, con menos efectos secundarios (punto muy importante en pacientes ancianos que toman mucha medicación) y menos coste, aunque sin duda, será la propia experiencia y la pericia del mesoterapeuta la que conseguirá unos resultados u otros.

Fuente: AMMIA (Asociación de Medicina Mesoterápica Iberoamericana)